Granada es una ciudad andaluza llena de contrastes, donde las huellas del pasado árabe se entrelazan con la herencia cristiana y el bullicio moderno. Situada a los pies de Sierra Nevada y a solo unos kilómetros del Mediterráneo, Granada ha sido testigo de algunos de los episodios más significativos de la historia de España. En este blog, te invito a recorrer algunas de sus calles más emblemáticas, saborear su exquisita gastronomía y descubrir sus tradiciones más arraigadas.
Calles emblemáticas de Granada
Caminar por las calles de Granada es una experiencia sensorial en la que el pasado y el presente conviven en perfecta armonía. Algunas de sus vías y plazas conservan la esencia de siglos de historia, mientras que otras muestran un dinamismo contemporáneo que atrae a turistas y locales por igual. Aquí te dejo algunas de las calles y barrios que no puedes dejar de visitar.
Calle Elvira
La Calle Elvira es una de las más antiguas y emblemáticas de Granada. Comienza en la famosa Plaza Nueva y se extiende hasta el barrio del Albaicín. Durante la época nazarí, fue la vía principal de entrada a la ciudad y uno de los centros neurálgicos del comercio. A día de hoy, conserva ese aire tradicional gracias a sus casas moriscas y a sus tiendas de artesanía, donde se pueden encontrar productos locales, como cerámicas y tejidos. Además, está llena de bares de tapas y restaurantes que sirven comida típica andaluza, convirtiéndose en un punto de encuentro tanto para turistas como para granadinos.
Calle Calderería Nueva
Conocida popularmente como “la calle de las teterías”, la Calle Calderería Nueva es un pequeño rincón de Marruecos en pleno corazón de Granada. Este callejón, repleto de tiendas de artesanía árabe, es famoso por sus teterías, donde se puede degustar té moruno acompañado de dulces típicos árabes, como los baklava. Las pequeñas tiendas que se alinean a
ambos lados venden desde lámparas de bronce y cuero hasta especias y tejidos coloridos.
Pasear por esta calle es como viajar en el tiempo, retrocediendo a la Granada del siglo XV, cuando la ciudad estaba bajo el dominio musulmán.
Paseo de los Tristes
El Paseo de los Tristes es, sin duda, una de las calles más pintorescas de Granada. A orillas del río Darro y con la imponente Alhambra como telón de fondo, este paseo ofrece una vista espectacular de la fortaleza más famosa de España. Su nombre oficial es Paseo del Padre Manjón, pero el apodo de “los Tristes” proviene de los cortejos fúnebres que pasaban por aquí camino al cementerio de San José. Hoy, el Paseo de los Tristes es un lugar lleno de vida, con terrazas donde sentarse a disfrutar del paisaje, pequeños bares y una atmósfera vibrante que invita a relajarse y disfrutar de la vista.
Albaicín
El Albaicín es el barrio más antiguo de Granada y uno de los más emblemáticos de la ciudad.
Sus estrechas calles empedradas, sus casas encaladas y sus miradores ofrecen una vista inigualable de la Alhambra y la ciudad. Pasear por el Albaicín es sumergirse en la historia de Granada. Declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, este barrio mantiene el trazado y la esencia de la época nazarí, cuando Granada era el último bastión musulmán en la península ibérica. Entre sus calles más destacadas se encuentran la Calle del Agua, que discurre cerca de los restos de una antigua muralla árabe, y el Mirador de San Nicolás, desde donde se obtienen las mejores vistas panorámicas de la Alhambra al atardecer.